La mejora competencial de los trabajadores no es una opción sino una necesidad que viene determinada por varios factores: legislación actual (industria, sanidad, fomento, tráfico, prevención de riesgos laborales…), cambios tecnológicos (automatización de procesos, nuevos programas, nuevos procesos…) y mejora del desempeño del puesto atendiendo a las necesidades de la empresa y del mercado con el que interactúa.
Todo ello conlleva que los procesos de aprendizaje que se llevan a cabo dentro de una organización, deberán contemplar los requisitos legales, exigencias del puesto, características de la persona que lo desempeña, expectativas y previsión de cambios a corto, medio y/o largo plazo.
Así pues, estarán de acuerdo conmigo en que
“hacer formación sobre la marcha” o
“cubrir lo obligatorio y el resto ya veremos” ya no es sólo insuficiente sino que
es contraproducente para la empresa en conjunto, derivando en equipos poco cualificados, con déficits en las competencias clave del puesto y desconocimiento general de las necesidades reales del equipo.
Por todo ello, nuestro modelo DESCOM plasma un proceso integral de la
gestión de la formación, pasando de un modelo correctivo (
“sobre la marcha”) a un modelo predictivo (actuación eficaz y eficiente).
Bajo este prisma, desarrollamos un proceso en el que los trabajadores desarrollan sus destrezas y habilidades y se hacen “competentes” para aplicarlos a su puesto de trabajo, lo cual enriquece a la empresa en conjunto.
Los
Certificados de Profesionalidad,
Contratos de Formación y otros cambios y
novedades tras la Reforma Laboral del 2012 apuntan en esta dirección, y es obligación del empresario el conocer las diferentes opciones y vías para poder conseguir un equipo formado y motivado, en definitiva, un equipo con el que conseguir el éxito, y nosotros, en Waribo Consultores, podemos ayudarle.